Martutxa Casares: ilustración y diseño con un carácter muy salvaje7 min read
Reading Time: 6 minutes«Me he dado cuenta de que la clave está en seguir las cosas que te gustan o te identifican para poder trabajar con gente más afín a ti”
Hoy entrevistamos a Martutxa casares, una artista gráfica que trabaja principalmente en ilustración y diseño gráfico. Martutxa se define como “una mujer inquieta que se sigue buscando a sí misma entre salidas a navegar y bucear y un trabajo que me encanta”.
Sus ilustraciones construyen un universo que parte del mar, del bosque y de los animales que viven en él. Los protagonistas de sus diseños siempre están acompañados de animales, maquillajes tribales y tatuajes. Todos ellos tienen un carácter salvaje lo que les otorga una personalidad muy característica y destacada.


De formación principalmente autodidacta, creció aprendiendo en talleres de pintores y escultores. Se tituló en la escuela superior de dibujo profesional (E.S.D.I.P) en ilustración, publicidad y diseño gráfico además de cursar un máster de 3D en CICE.
“Siempre he andado trasteando en cuadernos y diarios, y dibujando en cualquier pared que tuviera cerca, así que era lógico que a la hora de elegir un bachillerato me decantara por el artístico. No sabía hacia dónde me dirigía hasta encontrarme con la escuela E.S.D.I.P. pionera para mi en un curso de ilustración publicidad y diseño donde encontré definitivamente mi sitio. Posteriormente me metí de lleno en el mundo de diseño por ordenador en 3D, pero soy bastante impaciente a la hora de crear así que aguanté relativamente poco trabajando en el mundo digital”.
Comenzó trabajando como becaria y posteriormente como infografista en una empresa de eventos y publicidad, Central Multimagen. “Al final tomé la decisión de volar sola apoyada por mi familia. Me encerré a dibujar y buscar proyectos alternativos, y finalmente dejé la empresa”.
Nos cuenta que pensó que el origen del problema era la necesidad de adaptarse a un horario, sin embargo, destaca que “el problema estaba en no estar en contacto con la naturaleza día a día. Así que cogí los bartulos y me fuí a Altea donde estoy encontrando trabajos que me llenan enormemente”.
“Me he dado cuenta de que la clave está en seguir las cosas que te gustan o te identifican para poder trabajar con gente más afín a ti”, afirma.
Arte: “Para mí no existe una forma de expresarme en la que me sienta tan cómoda desde pequeña”
De todas las variantes para las que puedes trabajar ilustrando, ¿con cuál disfrutas más?
Si tengo que elegir probablemente sea en un método de trabajo, y es en equipo. Algo que agradezco de la vida en Altea es el poder tener un trato cercano con mis clientes directos, con los que colaboro y tengo relativamente cerca para poder construir y crear codo con codo de una manera mucho más cercana y tranquila.
¿Tu familia te ha apoyado siempre? ¿Tienen también relación con el mundo artístico?
Soy muy afortunada porque mi familia me ha apoyado y apoya incondicionalmente siempre. Mi hermana es probablemente uno de mis mayores apoyos porque es una gran artista con la que puedo, además de compartir pasión por nuestro trabajo, aprender a diario.
¿Qué es el arte para ti?, ¿Cómo crees que es la situación del arte en España?
La verdad es que es una pregunta a la que siempre me cuesta contestar. Me encantaría tener una respuesta clara, pero imagino que al final se reduce simplemente a que para mi no existe otra forma de expresarme en la que me sienta tan cómoda desde pequeña.

¿Piensas que es complicado trabajar en el mundo artístico?
Pienso que es complicado conseguir mantenerse dedicándose profesionalmente únicamente a un trabajo artístico en este momento y en este país.
Sabemos que Altea es uno de los lugares que más te inspiran, ¿a qué se debe?. Además de Altea, ¿qué otras cosas te inspiran?
Altea es refugio, pesca, buceo, horizonte y calma. No es que necesariamente me inspire el pueblo en sí, si no que trabajar desde aquí es infinitamente más sencillo de lo que era para mi en Madrid porque tengo un acceso muy fácil a las cosas que me hacen feliz.
“Todo lo orgánico tiene valor por encima de lo industrial”
Hemos leído que trabajas en cualquier soporte con alma, ¿a qué te refieres con esto?
Creo firmemente que todo lo orgánico tiene un valor por encima de lo industrial. Me refiero a que prefiero trabajar sobre un papel de algodón, una piedra o madera por encima de una pantalla o una tableta gráfica.
Desde que me he mudado y he salido de Madrid intento vivir con menos, le doy muchas vueltas a la hora de comprar por ejemplo un jersey. Invertir ese dinero en el trabajo a mano de alguien con un pequeño estudio creo que es algo que, además de ser necesario a la hora de cuidar el mundo en el que vivimos, tiene una calidad y un amor en cada nudo que no puede darte algo creado en serie en una fábrica.
¿Qué quieres transmitir con tus obras?
Más que una necesidad de expresar es una necesidad de vomitar toda la vorágine que llevo dentro. Cuando se refiere a mis dibujos, son una manera de ordenar sentimientos o aquello que se me hace infinitamente más complicado con palabras.


Uno de tus proyectos es la elaboración de diseños para el packaging de las cervezas de la marca Althaia Artesana, ¿cómo surgió esta colaboración?
La primera colaboración con Althaia, que fué Barlovento, surgió durante la primera exposición que hice en Altea. Conocí a Jorge que me contó que estaba empezando con una fábrica de cervezas artesanas, que le gustaba mi trabajo y que en el futuro me llamaría.
Fué toda una sorpresa cuando por fin nos sentamos juntos los tres tiempo después, ver cuanto teníamos en común Mayte, Jorge y yo sobre las ideas para darle forma a la primera etiqueta. Me dejaron vía libre 100% y confiaron en mí y en mi trabajo. Los tres sentimos una gran admiración y respeto por el mar, por la zona en la que vivimos y por las cosas hechas a mano.


Sabemos que muchas de las cervezas tienen una historia detrás, ¿Quién escribe esas historias? ¿Te basas en ellas para elaborar los diseños?
Una de las cosas geniales de trabajar con Althaia es que además de estar abiertos a propuestas y tener una manera de funcionar y gustos similares compartimos la curiosidad por las leyendas cercanas al pueblo. No hay nadie mejor para contarlas que los historiadores de la zona, hemos contado con Carlos M., Antón Sanchiz y con Juan V. Martín.
¿Cuáles son tus proyectos actuales? ¿Y futuros?
Actualmente trabajar con Althaia; la academia náutica Pailabot y Vasjaun son tres de los pilares donde está enfocado una buena parte de lo que ocupa mi tiempo.
Con Althaia siempre estamos horneando cosas nuevas, y en este momento estoy sumergida en decorar una cristalera en la academia de Pailabot con motivo del quinto centenario de la vuelta al mundo de Magallanes. Esta semana estoy abocetando para un mural en el pueblo y los encargos de tatuajes y personales que son una de mis partes favoritas del trabajo.
Ando trasteando con un par de libros que me gustaría tener tiempo para finalizar y estoy trabajando en mantener una exposición permanente en Calpe. Me guardo unas cuantas cosas en la manga que necesitan tiempo para poder materializarse, en fin, qué proyectos hay muchos en mi cabecita.
Y por último, ¿algún artista que te gustaría recomendarnos?
Durante los pasos por diferentes escuelas hasta llegar a encontrar por dónde iba mi camino definitivamente siempre tuve el ojo puesto en ilustradores extranjeros como Annie Owens y los hermanos Asaf y Tomer Hanuka, a los que sigo la pista muy cerca y siempre recomiendo. En referentes españoles siempre he admirado a Fernando Vicente, Patricia Metola y Adolfo Serra.